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El sabor de la Sierra

 



MERCEDES CASADO

BODEGUERA

Como en el resto de las Sierras, la familia política de Mercedes Casado siempre ha elaborado vino en casa, una tradición familiar, como la recogida de las cerezas o las aceitunas. Nacida en Salamanca y casada con uno de los fundadores, Mercedes ejerce las funciones de gerente, -aunque ella prefiere denominarlo “chica para todo”- de la bodega Perahigos, fundada en 2014 por dos hermanos, Antonio y Ambrosio Iglesias, en Garcibuey.

Tras adquirir treinta hectáreas de viñedos en parcelas de personalidades diferentes dentro del municipio de Sotoserrano, se decidieron a dar el salto hacia la profesionalización, cuidando especialmente la imagen de marca e incorporando un enólogo al equipo. Así comenzaron a producir diversos vinos con características propias. Además de comprar una bodega en Garcibuey, planean establecer otra sede en Miranda del Castañar para complementar su oferta actual con actividades ligadas al agroturismo y al turismo gastronómico que pongan en valor las actividades tradicionales de la zona.




“Siempre me ha gustado la Sierra. De hecho, compré una casa en Miranda hace ya treinta y cinco años. Siempre he venido a ella y tuve la gran suerte de casarme con un serrano hace veinticuatro años. Ahora no salgo de aquí.”

Mercedes se encarga de coordinar las diferentes áreas del negocio de la bodega: el trabajo de campo en las viñas, la fase de producción en bodega y el área comercial. La principal razón que les impulsó a fundar la bodega fue el amor a la tierra, el deseo de crear algo importante a partir de ella. Todo el conocimiento acumulado del arte de hacer vino que venía de tradición familiar, unido a los nuevos métodos y un enfoque de negocio moderno, les ha permitido seguir creciendo día a día, con una agenda llena de proyectos.





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